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Ha pasado más de un mes desde la última publicación. En este caso, tengo la que puede ser la mejor de las excusas: ¡vacaciones y muy poco tiempo! Decidí desconectar en mis vacaciones de todo el mundillo en general y pasar el máximo tiempo con mis seres queridos.

Hoy quería comentar un poco sobre eso que es tan relativo, importante para algunas personas y pasajero por otras: el tiempo.

EL TIEMPO: APROVÉCHALO

Cuántas veces habré oído esta frase a lo largo de lo que llevo de vida… Dicho por familiares, amigos, películas, entra otras fuentes. Este consejo, filosofía o como queramos llamarlo, que es aprovechar el tiempo, empieza a cobrar sentido (o por lo menos lo ha hecho para mí) al pasar la barrera de los 20 años de edad apróximadamente. La verdad es que desde que empecé los estudios para desarrollo web y posteriormente trabajar dedicándome a ello, mi tiempo ha volado y sigue haciéndolo día a día, mes a mes, pensando una y otra vez en si realmente estoy desperdiciando el tiempo o no. Lo cierto es que desde hace mucho decidí resolver esa pregunta simplemente aprovechando el tiempo en lo que me gusta hacer, sin más, buscando siempre nuevos retos, formas de mejorar y sobretodo disfrutar con lo que estoy haciendo. Porque aprovechar tu vida no es tirarte de un avión en paracaídas o hacer puenting porque sí. Cada persona disfruta la vida a su manera y es importante no desperdiciar el tiempo, bajo mi punto de vista, valorando dos claves importantes: no estancarse y no preocuparse más de lo requerido.

Teniendo los objetivos claros y los anteriores factores en cuenta me ha ido mucho mejor desde entonces, para ir avanzando y mejorando con esa sensación de -estar creciendo poco a poco-, pero sin hacerlo demasiado lento para que el tiempo no me supere.